Era sabado, las hojas que se despedìan del otoño tocaban su pelo cuando caminaba por la gran avenida, siento como si el estuviera buscando algo que aun no entiendo, hoy es el dìa màs feliz de Agosto, los colores que me rodean suelen escabullirse entre las conversaciones que tuvimos antes, palabras que no puedo redactar, hablar lo justo y necesario, dormir.

Tiritando en esos casos le bese sin darme cuenta, sin cuestionarme nada, y me quedè un tiempo observando su respiraciòn al dormir, las nubes a lo lejos acumularon seguridad.

Caminé libre escuchando los pajaros, el humo se acumulaba dentro de mis pulmones, de repente la habitaciòn se llenò de pedazos, de trozos, de cariño.

Si tan solo pudieras esconderme entre tus sabanas.. y dejame morir dentro.

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